Esta tarde nos hemos ido a ver a un tio de mi mujer que estaba en el hospital, como tenía un poco de sueño he tenido que entrar en un bar, cuando fue mi sorpresa cuando una vez sentado en el taburete se gira el camarero y zas, un chino, las piernas me temblaron de golpe, no puede ser un chino me iba a poner un café, no se trataba de huir de allí, pues como explicar a los niños que no me gusta que un chino ocupe el puesto de un españolito de a pie, que encima de ser generalmente mas guarro que la Charito, encima no sabe el oficio de hostelería, y simplemente esta allí, porque ha conseguido pagar el alquiler.
ya no tenia solución y pronuncie las palabras mágicas, por favor me pone un café solo con hielo, el señor chino me puso un vaso enorme lleno de hielo para un café normalito, he aquí que tuve que coger con la mano un hielito pues desgraciadamente se iba a aguar, con el hielo en la mano busco un sitio donde depositarlo y no lo encuentro, no había ninguna papelera, ni cenicero.
- Por favor chino.
extiendo la mano para darle el hielo y encima se ríe, supongo que nadie le habría dado un hielo, o simplemente le haría gracia, ya le dije que no había papelera, en estos momentos a mi hijo le entra ganas de hacer pis, le acompaño, no sabemos lo que nos vamos a encontrar.
Un baño lúgubre, feo y destartalado se nos abre ante nosotros, pero me he visto en peores situaciones, al niño no se le ocurre otra cosa que tocar la cisterna, jolines, lo que nos faltaba, hay que limpiar las manos, vamos a abrir el grifo y no sale agua, después de esperar un rato, se escucha un ruido de fondo, como para salir corriendo mi hijo y yo nos miramos y vemos como después de tanto ruido sale el agua entre pompas de aire, a mi niño se le ocurre echarse jabón, el jabón, es un bote de falso fairy, no puede ser, solo se las limpia sin agua.
Después de tal odisea, logro sentarme otra vez en el taburete, me echo el café y atención el café esta BUENO.
Cuando salimos a la calle nos dimos cuenta que al lado del bar chino, no es que hubiera otro bar, sino cuatro más. toda una anécdota
jejejeje... te persiguen
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