Ayer estuvimos de manera voluntaria en una misa en honor a una de las profesoras de nuestros niños en la etapa infantil, es una persona llena de valores y de espiritú, una de esas personas difícil de encontrar, volcada con la enseñanza y con los niños, con las personas marginales y con los padres de estas personas, una persona que nos ayudo a nosotros mismos, con estos revoltosos de niños, y desde esta pequeña familia les damos las gracias, y yo personalmente le doy un abrazo y mil Gracias por haber estado entre nosotros, enseñándonos lo que ya sabíamos Vivir, que la Vida es única y que estos cielos que tenemos junto a nosotros es lo mas importante de Ella, dedicarnos a educarlos para que puedan vivir un mundo mejor, no es parte de una utopia solo se trata de dedicarles Nuestro tiempo, y que sea el suyo, mostrarnos como personas y con el corazón abierto para que ellos que nos miran con esos ojos tan atentos tengan un buen espejo en el que reflejarse.
La Fuerza de la Vida se manifiesta en un monton de cosas, solo somos nosotros los capaces de verlo si andamos con el Espiritu limpio y dispuesto para recibirlo.
El momento que más me llenó fue cuando el hermano mayor de esta familia de 9 hermanos se dirigió a su manera a todos los que hemos sido parte de Victoria Fresnillo Poza, y nos dio las gracias, pero nos pidió una cosa que también Victoria en nombre suyo nos quería dar las gracias a nosotros por todo lo que sin querer le hemos dado, nos pidió a los presentes que uniéramos las manos unos a los otros como si fuéramos todos una mano y las personas con Corazón unimos nuestras manos y por un instante compartimos nuestras vivencias, nuestros recuerdos y por qué no nuestras esperanzas en un Mundo mejor.
Pues muchas veces nos olvidamos que somos todos iguales y todos somos hermanos ante los ojos de Dios.
Gracias Victoria.
La Familia Porras Villar.
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