Tiempo de porros.
Suena de fondo la música de doors,
mientras tú, me coges la mano
el porro pasa de tus labios a mi boca
y de mi boca a mi cabeza.
Es el momento de perderse entre el bosque
Atravesar miles de océanos verdes
Dejar que el instante no pase
Locura de mi cuerpo demente.
Barrizal que no descansa
tú mano me libera de aquel instante
el humo invade el coche.
Se mete entre las ruedas
Le hace volar envuelto entre colores.
Verde, mucho verde.
Rueda, asfalto, verde.
Monocromático, mezclado con sudor.
Espiga dorada, envuelta en mil
pensamientos.
Descubro de nuevo otra manera de ver tus
ojos.
Me rio; tú te descojonas.
Me zambullo entre tus risas zumbonas.
Mi mente se pierde ensoñadora.
Mientras el volante parece ir solo
El solo sabe dónde dirigirse.
Cambiamos los doors, por el canon de
Pachenbell.
Tú te quedas dormida, embriagada.
con una cara de felicidad tremenda.
Mi mano se desliza por debajo de tu falda.
Pero esta vez no es lo más importante que
pasa.
Vuelvo a coger la cerveza.
Vuelvo a coger otra curva.
Enciendo otro cigarrito de la risa.
Es tiempo de risas y porros.
El placer extenuado me hace soñar.
Embriagado por mil melodías.
Embotonado por tu falda
Desbotonado por mi pantalón.
Perdido entre tus braguitas.
Suelto el porro y casi me quema.
El sol se vuelve de mil colores.
Las hojas enverdecidas,
se vuelven de un solo color.
Las risas, se callan
para dejar espacio a un estado de suma
tranquilidad.
Siento que mis pensamientos se relajan.
Pierde velocidad el coche.
Mientras un gran espacio verde absorbe mi
coche.
Deliciosamente es engullido por él, y
aparcamos los dos.
Vuelvo a encender otro porro.
Creo que será el ultimo.
Mientras abro otra cerveza.
Miro
al Océano azulado
Se escuchan monótonas las olas.
Ahora no pienso nada.
Levito por encima del Mundo
y
Caigo derrotado sobre el gris verdoso.
Alfombras multicolores.
Visión de una vida feliz.
Tiempo de dejarme llevar.
Tiempo de porros verdes.
Tiempo de una sonrisa infinita
Tiempo de quedarme dormido
Sobre una alfombra verde y húmeda
Tiempo de volver a ser yo.
JOSE PEDRO PORRAS
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