ENCUENTROS EN SEPTIEMBRE

  

 Nadie nos ha enseñado a ser padres y no veas lo difícil que es, primero debes de encontrarte a ti mismo y demostrarte un día tras otro que tu puedes, que el camino que llevas para educar a tus hijos es el correcto pero aun así te saltan una cantidad de dudas que sencillamente cierras los ojos y tiras para adelante, como si no podría ser de otra manera, ( claro está, sin que se den cuenta de que te has equivocado o que simplemente tu harías lo mismo que ellos, o mejor aun ).

 Para muestra valga un botón:

  A la semana de empezar el cole, el profe de Héctor ya nos ha llamado la atención, mejor dicho me ha tocado a mí la papeleta de la supercharla de 20 minutos que me ha dado David su profe. En resumen que el NIÑO SE ABURRE, no presta atención en clase y encima incordia a sus compañeros, ( Lo mismo, lo mismito que en casa, pero con mas niños ).

-      Entonces que hago con el niño ( le digo yo al profe )

-      No sabría que decirte, pero seguro que entre los dos lo conseguimos, lo que pasa creo yo es que el niño es muy inteligente y las cosas que estamos en clase, como dice el, ya las sabe y se aburre.

-      Hombre, siempre ha estado trabajando con su hermana en casa y las cosas que están dando seguramente que ya las ha dado.

-      Si pero debe de portarse bien, y de momento no se le puede pasar de clase.

-      Habrá alguna manera que Héctor se porte bien.

-      Haberla seguro que la hay pero será ir probando a ver si dan resultado.

-      Mire David, usted tiene mi numero personal y si no se lo doy, si hay algún problema con el niño usted me llama y vengo.

-      Hombre Pedro, no creo que haga falta.

-      ( <pensamiento: no sabe usted lo que puede llegar a hacer Héctor).

Después de una dura charla con nuestro querido Héctor y dejarle nuevamente castigado sin televisión y a un plis de quedarse sin cenar, me dice al día siguiente:

-      Sabes papa.

-      Dime cariño

-      Hoy me voy a portar bien.

-      ( Bieennnnnn, ) pero no hay que portarse bien solo hoy

-      Bueno, también mañana, pero que no se acostumbre, que luego se acostumbran a que me porte bien.

Y en estos momentos tan difíciles que hago, lo mato, me rio de la situación, le pego otra charla ( después de la de anoche ), me rio, ( Eso nunca, nunca se debe de reír uno de estas cosas, que si no el niño no avanza), o simplemente paso.

Afortunadamente llego la hora de entrar en el cole y yo me voy a trabajar, que allí solo tengo los mismos problemas de siempre, todo un alivio la verdad.

Pensamiento: El niño promete, no sabemos a lo que llegara, pero prometer promete, mientras yo voy creciendo y cada día me voy haciendo más padre, otra faceta por la que hay que pasar.     GRACIAS HECTOR.

                                                               SEPTIEMBRE 2012.