Una cortita historia de amor.
El otro día me encontré con un chaval comprando unos litros en un chino y sin pretenderlo empezamos una bonita conversación, sobre el valor de la vida y de lo rápido que se va, sin darnos cuenta de que cada paso cuenta y no volverá.
Me quedé francamente impresionado por la pequeña historia que este chico me conto y que paso aquí a relataros.
Resulta que su familia es de Ávila y hace menos de un mes había fallecido su abuelo de cáncer, después de luchar durante más de dos años, viendo todos como poco a poco se apagaba. Por fin había llegado el final, después de 92 años, este señor estaba casado y aun le acompañaba su esposa de 86 años de edad, la cual no se había separado de él en ningún momento.
El falleció y a los 7 días murió su mujer, no tenía ninguna enfermedad, pero la mayor de las enfermedades fue para ella la soledad y la falta de su esposo.
Según la familia murió de tristeza.
Podría hacer algún poema al respecto pero sencillamente se quedaría corto.
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